SE HABILITA CURSO DE ORGANIZACIÓN DE EVENTOS EN FILADELFIA

Filadelfia, 3/marzo/2011.

Male Chamorro. Estudiante, Comunicación para el Desarrollo.

María Gloria Ruiz Díaz, instructora del Instituto San Agustín, oriunda de San Bernardino, llegó por vez primera a la ciudad de Filadelfia, con el firme propósito de capacitar a varones y mujeres en el arte de organizar eventos. Antes, un viaje de nueve horas con contratiempos mecánicos, superados por la solvencia del chofer y las esporádicas gomerías ubicadas en la transchaco, dieron paso a la reunión de coordinación con los interesados en el curso, en el salón taller del Colegio Departamental Boquerón.

Mientras todo se disponía, entre el cansancio y la alegría por el encuentro, María Gloria observaba los árboles del patio del colegio tratando de descubrir nombres y preguntando cómo se llamaba cada especie. Particularmente llamaba su atención la forma oval de la cápsula que contiene la semilla del quebracho.

Cuando el ambiente del salón se dispuso, se inició la reunión. La coordinadora, dió una breve y cordial bienvenida a María Gloria y seguidamente habló de los requisitos y las “reglas del juego” provenientes del Sistema Nacional de Formación y Capacitación Laboral del Ministerio de Justicia y Trabajo, para la realización del curso. Entre ellos mencionó: presentar fotocopia de cédula de identidad, cumplir con una asistencia del 70%, las personas interesadas deben concurrir a la Secretaría de la Mujer, Niñez y Adolescencia, ubicada sobre la Avda. Hindenburg para la inscripción, siendo el curso totalmente gratuito, además de contar con materiales de apoyo.

Una atenta escucha. Una joven con su pequeña en brazos rompe el hielo y comenta su experiencia anterior y positiva con el sistema y propone realizar prácticas con todos los implementos necesarios para organizar un evento determinado.

Ante la expectativa manifiesta, María Gloria se pone de pie y va hacia la pizarra, expone sobre la carga horaria para la teoría y práctica, las sesiones de autoestima y de trabajo en grupos. Y el desafío de capacitar a un grupo de veinte personas culturalmente diverso.

La primera reunión se cierra. Los asistentes se muestran satisfechos y comprometen su asistencia para el 11 de marzo del corriente, día de inicio del curso. María Gloria, se muestra interesada en conocer más sobre la idiosincrasia de los habitantes de la ciudad, quedó cautivada con el grupo. Luego, retoma su mirada y preguntas hacia las particularidades de los árboles nativos.